27 de noviembre de 2006

La avaricia sin límite

—Tenemos que permanecer desconocidos —oyó, como de muy lejos—, nadie ha de saber que existimos y qué estamos haciendo... Nosotros nos ocupamos de que nadie pueda retenernos en la memoria... Sólo mientras nos mantengamos desconocidos podremos hacer nuestro negocio... un negocio difícil, sangrarles el tiempo a los hombres hora a hora, minuto a minuto, segundo a segundo... porque todo el tiempo que ahorran lo pierden... nosotros nos lo quedamos... lo almacenamos... lo necesitamos... lo ansiamos... ¡Ah, no sabéis lo que significa vuestro tiempo!... Pero nosotros lo sabemos y os lo chupamos hasta la piel... Y necesitamos más... cada vez más... porque nosotros también somos más... cada vez más... cada vez más...

Un Hombre Gris en Momo - Michael Ende


No hay comentarios: